El Dr. Federico Castillo Suescun, ha patentado con la ayuda del IDIVAL dos dispositivos cuya utilización puede contribuir a mejorar el pronóstico de los pacientes con abdomen abierto, una dolencia muy grave, con un índice de mortalidad del 70%. Su proyecto está ahora en busca de financiación para su desarrollo con un diseño mejorado y la realización de pruebas preclínicas y clínicas, antes de llegar al mercado.
En ocasiones, los cirujanos deben dejar el abdomen abierto en algunos pacientes críticamente enfermos. Ocurre cuando las vísceras tienen mucho líquido, aumentando la presión dentro del abdomen, lo que obstaculiza la circulación y produce el fallo de otros órganos como el riñón. Este problema se denomina Síndrome Compartimental Abdominal.
Este cirujano de Valdecilla, ha patentado recientemente dos adelantos que pueden mejorar la recuperación de estos pacientes críticos.
El primero de ellos, es una lámina con la que se recubren las vísceras abdominales para protegerlas y optimizar los drenajes del exceso de líquidos. Lo que se hizo fue diseñar un dispositivo que evite la saturación del apósito para que los cirujanos puedan cerrar el abdomen lo más pronto posible disminuyendo la posibilidad de complicaciones al tener el abdomen abierto.
Los pacientes que sufren este síndrome tienen muchas probabilidades de morir, por eso urge restablecer la situación y cerrar el abdomen nuevamente. Para ello, se desarrolló la segunda invención de este profesional de Valdecilla: un sistema de cierre progresivo que se adapta a la evolución del paciente ya que existen algunos cierres comerciales de tracción mecánica pero que no se modifican durante la terapia por lo que se mejoró el diseño para poder modificarlo durante todo el tiempo que el paciente esté en cuidados intensivos. Entonces, se puede medir la presión y variar la tensión del aparato de acuerdo con la presión intraabdominal, lo cual es uno de los puntos clave de la invención.